Dándole vuelta a cosas que aparentemente no tienen nada que ver con la política: La dieta y la obesidad, o la cultura de la conducción y los accidentes, o los horarios de las bibliotecas municipales y la cultura, las conductas prepotentes y la violencia de género, los jabones perfumados y las alergias...
(Imagen del Hotel Algarrobico)
O cuánto suelo está sellado y cuánto suelo se ha dejado sin sellar o vuelto a poner al servicio del equilibrio ecológico.
En pocos años, en Castilleja, he visto como han ido desapareciendo árbol tras árbol en la calle Real y en otros sitios, y superficies sin sellar, reemplazándolas por cemento, alquitrán y piedra. Y en todo el Aljarafe se están sellando los cauces de arroyos y riachuelos que a lo largo de miles de años se han producido por la acción del agua natural. A cambio se están creando espacios verdes ordenados y... cucos.
Y es que los espacios verdes que había antaño no valían; ni valían como punto de partida para los parques que se "necesitaban" porque la Ley exige un cierto porcentaje de superficies verdes.
Cuando caen esas trombas de agua que parece que son cada vez más escasas, nos encontramos con que los cauces de desagüe de antaño ya no existen. Y el agua se busca otros caminos, dando con puertas, sótanos, cocheras y viviendas.
Y los sistemas de evacuación de agua, las canalizaciones, están dispuestas para caudales medios en vez de caudales máximos. Así que soportan cierta confluencia de derroche de grifos, bañeras y cisternas de w.c. pero no abarcan estas cantidades más la cantidad extraordinaria de aguas pluviales.
Y de paso, se está dando en Andalucía un fenómeno que ya tiene tradición en otros países centroeuropeos: grandes extensiones de arboleda están enfermas o muertas. Por lo demás, gracias a nuestro uso intensivo e irresponsable del agua y al desequilibrio ecológico que causamos, los niveles de aguas freáticas están bajando.
¿Alguien quiere hacer el esfuerzo y sumar a todo esto 3 cosas? La subida del nivel del mar, el aumento general de las temperaturas y la desertificación - todo ello efecto del llamado cambio climático, fruto de nuestra desidia y negligencia...
Y las soluciones que aquell@s polític@s nos ofrecen que hoy por hoy conforman la mayoría en estas tierras, son aberraciones como la SE-40, más urbanizaciones y más carreteras.
Existe dos buenas razones para insistir en esta forma de hacer política: es segura y es rentable.
Segura porque, acomodad@s en la rutina y la costumbre, no se arriesgan en tomar decisiones "menos populares" que cuestionen su permanencia en el poder.
Y rentable porque la clase política, como clase, participa como cómplice del poder fáctico -que son las finanzas- y recibe plusvalías importantes tomando decisiones que garantizan las ganancias máximas por venta y explotación.
Iniciativa para comentar libremente lo que sucede en Castilleja, intercambiar información, desvelar "secretos", crear conciencia y fomentar la rebeldía...
sábado, 13 de septiembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario